EVOLUCIÓN DE LA UNIÓN SOVIÉTICA HASTA 1953


LA GUERRA CIVIL: ROJOS Y BLANCOS
Cartel invitando a defender la revolución
 Quienes se oponían a las medidas que estaba tomando el gobierno revolucionario dirigido por los bolcheviques, recurrieron en abril de 1918 a las armas para derribarlo. Los partidarios de volver a la monarquía más los sectores liberales y conservadores opuestos a las ideas socialistas que dominaban en los soviets, se unieron contra los que sostenían al gobierno revolucionario.
Así se formaron dos bandos: los blancos (zaristas y liberales) y los rojos (los que apoyaban al gobierno revolucionario). Los rojos no solamente tuvieron que enfrentar a los blancos sino  a las tropas de otros países como Polonia, EEUU y Japón, entre otros, que intervinieron para hacer caer al gobierno socialista por temor a que su influencia se extendiera. Los rojos, encabezados por los bolcheviques y dirigidos por Trotski triunfaron luego de dos años de intensas luchas.
Terminada la guerra civil, los bolcheviques (que habían pasado a llamarse Partido Comunista) habían dominado la situación; los partidos políticos que habían sido derrotados en la guerra civil desaparecieron y dentro de los sectores revolucionarios o rojos eran los únicos organizados y con objetivos definidos.
De acuerdo a las ideas en que se basaban los bolcheviques, el marxismo interpretado por Lenin, la revolución realizada en Rusia permitía a los sectores proletarios, obreros y campesinos, hacer su propio gobierno (dictadura del proletariado) y aplicar medidas que permitieran crear un estado socialista para luego llegar a una sociedad comunista. Esas medidas eran:
1)       el control de los obreros sobre las fábricas
2)       quitar la tierra a los terratenientes y distribuirla entre los campesinos,
3)       no pagar la deuda dejada por el gobierno del emperador,
4)       crear granjas colectivas,
5)       nacionalizar las grandes empresas que estaban en manos extranjeras,
Lenin barriendo a los enemigos
6)   dirigir y planificar la economía a través del estado.
La guerra civil trastocó los planes del gobierno. Al profundizarse la crisis se tomaron medidas más radicales porque los alimentos escasearon y la producción de las fábricas disminuyó. Estas medidas conocidas como “comunismo de guerra” se aplicaron entre 1918 y 1920 y establecían la obligación de trabajar, el aumento del horario de trabajo diario, la obligación de los campesinos de vender sus cosechas al estado para que éste pudiera vender los alimentos baratos a la población y la estatización de todas las fábricas que tuvieran más de 10 trabajadores.
Estas medidas provocaron el descontento de muchos sectores, sobretodo de aquellos que esperaban que la revolución por si sola generaría el bienestar en poco tiempo. Los dirigentes bolcheviques explicaban que sin sacrificios nada se lograría, pero no pudieron evitar algunas rebeliones y la oposición de los campesinos que escondían las cosechas para hacer subir los precios. Para impedir mayores problemas Lenin condujo con mano férrea la economía y apresuró el fin de la guerra civil.

LA “NUEVA POLÍTICA ECONÓMICA”
Desde los primeros meses de 1921 Lenin tuvo ante sí la enorme tarea de reconstruir una economía destruida por la Primera Guerra Mundial y por la guerra civil. El comunismo de guerra había provocado una reacción negativa en los campesinos que, luego de obtenidas las tierras, querían obtener ganancias con sus cosechas, cosa que no habían podido hacer al quedarse el estado con su producción a cambio de casi nada. Por esto se limitaban a producir sólo lo suficientes para su alimentación. Esto causó carestías severas. Por otro lado la industria se encontraba casi paralizada. En marzo de 1921 se produjo u motín de marinos en el puerto de Kronstadt que fue sofocado rápidamente por el Ejército Rojo.
Lenin observó que se necesitaban cambios para obtener el apoyo de los campesinos y lograr un despegue económico, fue lo que llamó la “Nueva Política Económica”. Estos cambios fueron:
1)       Se permitió a los campesinos vender libremente su producción pagando un impuesto proporcional a lo que producían.
2)       Las grandes empresas, la industria pesada, se mantuvo en manos del estado, pero se permitió la propiedad privada de empresas medianas y pequeñas.
3)       Se incentivó la presencia de técnicos extranjeros para incorporar nuevos conocimientos.
4)       Se volvieron a tomar en la administración de las empresas estatales funcionarios administrativos  que, a pesar de compartir las ideas del gobierno revolucionario, poseían una capacidad necesaria para sacar adelante las empresas.
5)  Se permitió el comercio privado minorista. El comercio exterior y los bancos continuaron en manos del estado.
Para los dirigentes bolcheviques estos cambios  significaban permitir ciertas formas de economía capitalista (empresas privadas, libertad de precios agrícolas) dentro de la planificación socialista. Era el retorno limitado de la empresa privada hasta que la recuperación estuviese asegurada, pero a largo plazo el objetivo era el completo control estatal de la industria y la agricultura como paso previo para llegar al comunismo (propiedad común de los bienes).

LOS CAMBIOS EN LA SOCIEDAD
En los primeros años que siguieron a la revolución la sociedad rusa se vio conmovida. Los obreros se encontraban con derechos hasta el momento desconocidos y un gobierno que decía gobernar en su nombre. Los campesinos pobres habían obtenido las tierras que reclamaban, pero no estaban de acuerdo en formar cooperativas y querían trabajar sus tierras por su cuenta aunque esto fuera poco productivo. Los campesinos con mayor cantidad de tierras se habían enriquecido por el aumento de los precios de los alimentos durante la guerra civil. Los intelectuales estaban en plena fermentación anunciando nuevas concepciones de la literatura y el arte. Los arquitectos diseñaban fantásticos proyectos sobre las futuras ciudades comunistas.
Los más asombrados seguramente eran los integrantes de las antiguas clases altas (aquellos que no habían huido) que veían a los obreros discutir como dirigir una fábrica y tenían que compartir las piezas de sus mansiones con personas que antes trabajaban para ellos).
La dirigente bolchevique Alexandra Kollontai divulgó sus ideas sobre el papel de la mujer en la nueva sociedad que eran revolucionarias para la época: igualdad total de los sexos, derecho de la mujer a abortar. Algunas de sus ideas se pusieron en practicarse al transformarse en leyes: aborto, divorcio, igualdad entre los hijos legítimos y los nacidos fuera del matrimonio.
Se extendió la enseñanza con masivas campañas de alfabetización y se trató de complementar la enseñanza intelectual con la manual. También se impulsó la actividad científica, considerando que el desarrollo de la ciencia era fundamental para aplicar nuevos conocimientos a la producción.

LA CREACIÓN DE LA URSS
El 30 de diciembre de 1922 se formó la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Estaba formada por 15 estados, Rusia era  uno de ellos, que correspondían a casi todos los territorios que antes habían formado el imperio ruso disuelto tras la revolución de 0ctubre de 1917. En 1924 entró en vigencia una constitución que establecía como órgano máximo de gobierno al Soviet Supremo formado por dos cámaras: la de la Unión (con diputados elegidos en representación de toda la URSS) y la de las Nacionalidades (con diputados elegidos por cada una de las 15 repúblicas).

LA ERA DE STALIN (1924-1953)

Stalin
En enero de 1924 murió Lenin, quien hasta ese momento había sido el principal conductor político tras la revolución de 1917. Su desaparición abría dudas sobre el futuro del gobierno revolucionario y sobre el movimiento comunista internacional. Después de la revolución y del triunfo de las ideas socialistas en Rusia, se habían formado partidos comunistas en muchos países que veían al Partido Comunista de Rusia (luego de la URSS), como el “hermano mayor” que indicaba el camino a seguir. De los dirigentes bolcheviques dos parecían las figuras que podían suceder a Lenin: León Trotski y José Stalin. En el transcurso de los años 20 las diferencias entre ambos fueron aumentando.
Las diferencias no sólo eran personales sino también ideológicas. Trotski era partidario avanzar rápidamente en la industrialización aunque fuera a costa de los campesinos que se estaban enriqueciendo, para poder llegar más rápido a la etapa comunista. Además consideraba que había que extender la revolución a otros países, sosteniendo que la revolución comunista tenía que ser internacional y mientras existiera un país capitalista en el mundo no se podía llegar a una sociedad sin clases sociales. Acusaba a Stalin y a otros dirigentes de apartarse de las ideas marxistas originales y de formar una burocracia que estaba gobernando para favorecerse ella y no para los obreros.
Stalin sostenía que había que asegurar los logros de la revolución en la URSS antes de extenderla a otros países, haciendo acuerdos con los países capitalistas para evitar una guerra antes de estar preparados. La idea se resumía en la frase “hacer de la URSS la patria del socialismo”, aunque fuera a costa de frenar el movimiento comunista internacional.
Trotski era un brillante intelectual y había sido el jefe del Ejército Rojo. Stalin era el secretario del partido Comunista, lo que le dio la ventaja en la competencia con Trotski, porque desde ese cargo pudo maniobrar hasta que Trotski quedó sin apoyo de los otros líderes comunistas y finalmente fue expulsado del partido y desterrado (1929).
Desde su cargo de Secretario General del Partido Comunista de la URSS, Stalin gobernó con mano dura hasta su muerte en 1953, siendo su poder mayor que el de quienes ocupaban cargos de gobierno. Los dirigentes que criticaron sus medidas  fueron apartados de los cargos de dirección, muchos fueron a la cárcel y otros juzgados y condenados a muerte. La mayoría de la dirección bolchevique de 1917 fue eliminada por Stalin.
Los planes quinquenales.-  El gobierno soviético bajo el liderazgo de Stalin se propuso aumentar la producción industrial y agrícola. Un rápido crecimiento de la industria pesada se consideraba esencial para poder enfrentar un ataque de las potencias capitalistas, además se pensaba que cuanto mayor fuera el número de obreros más se avanzaría hacia el comunismo. La producción agrícola había que incrementarla tanto para el consumo de los obreros industriales como para exportar los excedentes.
El desarrollo de la industria y la agricultura se abordó a través de la planificación estatal mediante los planes quinquenales el primero de los cuales se puso en práctica en 1928. Se planificaba para cinco años fijándose metas a alcanzar en cantidad de producción. Los primeros planes se concentraron en la industria pesada: carbón, hierro, acero, petróleo, maquinaria, electrificación. A pesar de los errores el éxito fue notable alcanzando la producción los niveles de las potencias capitalistas como Inglaterra y Alemania. Se construyeron cientos de fábricas, muchas de ellas en la parte asiática de la URSS que era la más atrasada.

PRODUCCIÓN EN MILLONES DE TONELADAS

1900
1913
1929
1938
1940
Carbón
16
36
40
133
164
Hierro
2.7
5
8
26
15
Acero
2.5
5
5
18
18.5


Stalin se convirtió en jefe indiscutido de la URSS
 ¿Cómo se logró? El dinero fue obtenido de los propios soviéticos sin inversiones extranjeras ni préstamos externos. Se utilizó el dinero obtenido por las exportaciones de cereales y los impuestos cobrados a los campesinos. Como eran empresas estatales la ganancia no se la llevaba un empresario para sus gastos personales sino que se reinvertía en la producción, mejorando la maquinaria, aumentando las instalaciones, etc. Se contrataron técnicos extranjeros, se mejoró la educación en las universidades y escuelas técnicas para crear una generación de trabajadores calificados. Se adoptaron métodos de incentivo a los trabajadores pagándose según se fuera experto o no y se otorgaban premios por producción. En las fábricas existía una rígida disciplina castigándose severamente los errores.
La colectivización.-  De acuerdo a la propaganda del gobierno, la URSS era un estado socialista, una “dictadura del proletariado”, donde se daba prioridad a lo colectivo sobre lo individual y si era necesario había que recurrir al sacrificio de unos pocos para obtener el beneficio de la mayoría. Sobre la base de este pensamiento fue que se impuso la colectivización de los campesinos. Estos habían recibido la tierra quitada a los terratenientes y la trabajaban individualmente mostrándose reacios al trabajo común.
 Para el gobierno soviético este sistema era ineficiente porque las granjas pequeñas no producían adecuadamente y carecían de posibilidades de invertir en mejorar la maquinaria, abonos, etc. Bajo la dirección planificadora del estado y en superficies mayores con uso de tractores y cosechadoras, aumentaría considerablemente la cantidad de productos agrícolas. Además el gobierno de Stalin no veía con buenos ojos la formación de una clase de campesinos ricos (kulaks) que se podían transformar en terratenientes.
El primer plan quinquenal (1928-1933) obligó a los campesinos a formar cooperativas agrícolas donde usaban en común la maquinaria y la semilla y se repartían la ganancia de lo producido. Si los campesinos se oponían a entregar su tierra a la cooperativa eran obligados a la fuerza. Se instigaba a los campesinos más pobres a tomar la maquinaria y el ganado de los que se oponían y entregarlo a las cooperativas. Muchos de los campesinos que se oponían a la colectivización fueron arrestados y enviados a Siberia. Los que se organizaban para resistirse fueron fusilados. Se calcula que diez millones de kulaks fueron desplazados o ejecutados.
Dentro del Partido Comunista surgió la oposición de Bujarín a la colectivización forzada, sosteniendo que debía hacerse voluntaria y gradualmente. Bujarín fue acusado por Stalin de traición y fue condenado a muerte. En 1928 las granjas colectivas agrupaban a 130 mil campesinos. Un año después la colectivización alcanzaba a un millón de familias y en 1930 eran ya 15 millones de familias. Para 1937 se había colectivizado más del 90 % de la tierra laborable. Stalin podía estar satisfecho: mediante la fuerza logró que en 1940 la producción superara el 80% de la registrada en la Rusia previa a la revolución.

LAS CONSECUENCIAS DE LA GUERRA Y LA RECONSTRUCCIÓN

Unos 20 millones de soviéticos murieron durante la Segunda Guerra Mundial cuando la URSS fue invadida por la Alemania nazi en 1941. En ciudades enteras como Kiev y Minsk fueron arrasadas y otras como Leningrado (ex Petrogrado) eran irreconocibles.
Las industrias, que antes de la guerra se concentraban en el oeste de la URSS, fueron trasladadas hacia el este para evitar que cayeran en manos alemanas. La tierra laborable había sido quemada para no dejarle nada a los invasores. La producción agrícola descendió un 40%; el consumo que ya era bajo antes de la guerra, se vio reducido aún más.
La guerra aumentó el prestigio de Stalin dentro y fuera de la Unión Soviética. Para los soviéticos Stalin era el símbolo de la resistencia ante el nazismo y se lo comparaba con los antiguos héroes de Rusia. La victoria aumentó la confianza de los soviéticos e impulsó el orgullo nacional afirmando la postura de Stalin de hacer de Rusia la patria del socialismo.
Cartel antisoviético acusando a Stalin de querer
apoderarse de Europa
Después de la guerra la situación internacional de la URSS cambió rompiendo el aislamiento al que la habían sometido las potencias occidentales. Durante la guerra había sido aliada de EEUU, Inglaterra y Francia por lo que estos países dejaron por algún tiempo de hablar del “peligro rojo”. Al terminar la guerra casi toda la parte oriental de Europa estaba ocupada por el ejército soviético que había expulsado de allí a los alemanes. En esos países (Polonia, Hungría, Rumania, Bulgaria, Checoslovaquia) se fueron creando gobiernos que seguían el modelo soviético y reconocían el liderazgo de Stalin. También en China se producía el triunfo de la revolución dirigida por Mao Zedong que implantó un estado similar al soviético. Ahora la URSS tenía sus propios aliados y podía formar un bloque para enfrentar a las potencias capitalistas de occidente. Con los países de Europa Oriental formó el Pacto de Varsovia, una alianza militar para enfrentar a la OTAN.
A partir de 1945 se realizó un enorme esfuerzo  para recuperar a la URSS. Muchas de las industrias que se habían trasladado al este  volvieron al oeste, se construyeron enormes centrales de energía eléctrica, se abrieron canales fluviales, se organizaron gigantescas industrias y se industrializó Siberia.
La guerra había disminuido la producción de las industrias en un 50%, pero dos años después de terminada, en 1947, las industrias ya habían alcanzado el nivel que tenían antes del conflicto. En 1946 Stalin anunció que en cinco años la URSS produciría 500 millones de toneladas de carbón y 60 millones de toneladas de petróleo. Las cifras parecían fantásticas pero se alcanzaron antes de lo previsto, superando en esos productos a EEUU.

EL APOGEO DE STALIN

El culto a la personalidad.- Stalin resolvía prácticamente sólo concentrando el poder en sus manos y evitando que surgieran nuevos dirigentes que compitieran con él. Desconfiaba de la capacidad de quienes le rodeaban y por eso no delegaba en nadie su autoridad. El desarrollo industrial alcanzado le había dado prestigio como organizador y planificador; la guerra lo había transformado en héroe y las “purgas” (eliminación) de rivales dentro del Partido Comunista le permitían gobernar sin rivales. La propaganda lo convirtió en un ser imprescindible e infalible. Su retrato estaba en las oficinas, en las fábricas y en los hogares. Se hacían estatuas en su honor y hasta una ciudad, Stalingrado, llevaba su nombre. Existía un culto a su personalidad.
La concentración del poder.-  En 1936, tras muchas discusiones, se estableció una nueva constitución aparentemente más democrática, que permitía a todos los ciudadanos elegir mediante el voto secreto a los miembros del Soviet Supremo. Pero este se reunía sólo durante unas pocas semanas al año y elegía a un órgano más pequeño, el Presidium, para que actuara en su nombre y designara a los ministros.
La elección se hacía en base a listas que eran armadas por el Partido Comunista. En sus orígenes el Partido Comunista tenía una dirección colectiva y se tomaban las decisiones por mayoría. Ese era una de las ideas básicas de los bolcheviques en 1917. Pero la mayoría de los dirigentes bolcheviques de esa época habían muerto en las “purgas” realizadas por Stalin. Los que habían quedado no se atrevían  a discutir las decisiones de Stalin y los nuevos dirigentes habían surgido bajo su protección y le obedecían fielmente.
El Partido Comunista soviético tenía en 1945 seis millones de afiliados que elegían un Congreso que a su vez elegía al Comité Central encargado de tomar las decisiones. Pero ni el Congreso ni el Comité Central se reunían, por lo tanto las decisiones las tomaban los funcionarios rentados del partido (la nomenklatura). Entre estos funcionarios se elegían a los directores de los organismos del estado. Por lo tanto era un pequeño grupo el que tomaba las decisiones y recibían ventajas y privilegios por sus funciones, para que sólo se dedicaran a eso y no tuvieran que preocuparse por otra cosa. Para mantener esos privilegios cumplían órdenes y trataban de no discutirlas o mostrarse innovadores. Al no funcionar los órganos del P. Comunista, las decisiones quedaban en manos del Secretario del partido: Stalin.
La censura.-  El gobierno dirigido por Stalin reglamentó las artes y las ciencias. Las publicaciones de libros y revistas, las artes plásticas, el cine yel teatro eran controlados y censurados. Se prohibía todo aquello que expresara “valores burgueses”. Se estimulaba representar los logros del régimen, las metas alcanzadas, usándose el arte como instrumento de propaganda del gobierno. En los hechos quedaba al criterio arbitrario de los funcionarios decidir que era conveniente y que no.
El arte soviético, que había tenido originalidad en los primeros años que siguieron a la revolución rusa, se estancó, perdió creatividad y se limitó a repetirse en un mismo estilo al que se llamó “realismo socialista”.